El software es un arte, no hay otra forma de definirlo, no importa la clasificación, no interesa la metodología, la expresión detrás del software, de cada programador es única, programa y no mires para atrás, solo date el tiempo para rescatar tus mejores vicios, el mejor código que escribirás es el próximo: la escritura de software es la generación interminable de conductas individuales, tu y tu código, ¿necesitas algo más?, el programador se transforma al codificar, entiende la importancia de su trabajo, aún cuando equilibramos el mundo pensando que la demás gente (algunos llegán a tener la fortuna de usar nuestro software) no lo saben, minimizan el arte, no nos comprenden, escribamos software para quien lo necesite, para aquella entidad que sea mejor una vez implementadas nuestras líneas de código...
El software es un arte, no lo nombres así cuando no satisfaga tus requerimientos, la primera prueba de calidad debe ser el propio autor, la exigencia debe ser al máximo, insultate cuando no seas capaz de lograr el resultado que tienes en la mente, no festejes de más tus logros, debe ser normal, exigete cuando hayas logrado tu mejor resultado, sonríe lo necesario, un programador exitoso tiene el doble de retos por delante, algunos nos gusta llamarlos proyectos.
Un proyecto de software debe cumplir el tiempo estimado de desarrollo, debe exigir la presencia de recursos humanos capaces de aprender y de colaborar con otras personas, su costo debe ser calculado de acuerdo a la experiencia, al cliente y a una pequeña aplicación de la teoría de ingeniería de software, comparte tu código, no más de lo que te gustaría que los demás te compartieran, supon que existe una mejor manera de resolver el problema, aprende a encontrar en Internet, domina el inglés, responde las preguntas de quien supone tienes mayor experiencia, busca formas de expresarte, el software debe ser valorado, si no eres idealista, no programes, dedicate a otra cosa.
El software es un arte, necesitamos idealistas, gente con sueños y metas exhaustivas por lograr, ¿que vamos a programar hoy?, ¿que código vamos a mejorar?, lee código que no es tuyo, documenta tus experiencias, genera bitácoras de desarrollo, entiende que un software no es completo sin su documentación, encuentra tu motivación y exigela, dignifica al cliente, dignifica la actividad, debemos empezar por nosotros mismos.
Despierta y visualiza el numero total de resultados que tendrás hoy, no cuentes tus líneas, eso lo hacen los mediocres que necesitan numeros increíbles para suponer que programan bien, sé una persona completa, no mires tu acta de nacimiento, solo escribe software, no llenes tu vitae de lenguajes de programación, llenalo de proyectos exitosos, no exageres tus desvelos, justificalos, vivelos, disfrutalos, si te gusta programar nunca sera un sacrificio el siguiente día; sientate en un lugar cómodo, en tu sitio, en tu mundo, aislate lo necesario, sal y fuma un cigarro, toma aire, grita, marca a casa, cuando el programa parece que no entiende lo que le dices, recuerda que el error esta en tí, y eres el único en este mundo que lo puede resolver, mide tu eficiencia, no digas que eres bueno hasta que los demás digan que eres un genio.
El software es un arte, no lo nombres así cuando no satisfaga tus requerimientos, la primera prueba de calidad debe ser el propio autor, la exigencia debe ser al máximo, insultate cuando no seas capaz de lograr el resultado que tienes en la mente, no festejes de más tus logros, debe ser normal, exigete cuando hayas logrado tu mejor resultado, sonríe lo necesario, un programador exitoso tiene el doble de retos por delante, algunos nos gusta llamarlos proyectos.
Un proyecto de software debe cumplir el tiempo estimado de desarrollo, debe exigir la presencia de recursos humanos capaces de aprender y de colaborar con otras personas, su costo debe ser calculado de acuerdo a la experiencia, al cliente y a una pequeña aplicación de la teoría de ingeniería de software, comparte tu código, no más de lo que te gustaría que los demás te compartieran, supon que existe una mejor manera de resolver el problema, aprende a encontrar en Internet, domina el inglés, responde las preguntas de quien supone tienes mayor experiencia, busca formas de expresarte, el software debe ser valorado, si no eres idealista, no programes, dedicate a otra cosa.
El software es un arte, necesitamos idealistas, gente con sueños y metas exhaustivas por lograr, ¿que vamos a programar hoy?, ¿que código vamos a mejorar?, lee código que no es tuyo, documenta tus experiencias, genera bitácoras de desarrollo, entiende que un software no es completo sin su documentación, encuentra tu motivación y exigela, dignifica al cliente, dignifica la actividad, debemos empezar por nosotros mismos.
Despierta y visualiza el numero total de resultados que tendrás hoy, no cuentes tus líneas, eso lo hacen los mediocres que necesitan numeros increíbles para suponer que programan bien, sé una persona completa, no mires tu acta de nacimiento, solo escribe software, no llenes tu vitae de lenguajes de programación, llenalo de proyectos exitosos, no exageres tus desvelos, justificalos, vivelos, disfrutalos, si te gusta programar nunca sera un sacrificio el siguiente día; sientate en un lugar cómodo, en tu sitio, en tu mundo, aislate lo necesario, sal y fuma un cigarro, toma aire, grita, marca a casa, cuando el programa parece que no entiende lo que le dices, recuerda que el error esta en tí, y eres el único en este mundo que lo puede resolver, mide tu eficiencia, no digas que eres bueno hasta que los demás digan que eres un genio.
El software es un arte, ¿alguna vez has sido artista?
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