Gracias a los Tigres del Norte y a Byron.
Y hoy me quedo en tus brazos aunque me llamen infiel, con ella voy al campo de batalla de los pleitos... y yo prefiero la guerra de tus ansias, de tus besos... yo soy capaz de locuras por estar entre tus brazos, yo no renuncio a la gloria de tu cuerpo y de tu amor, yo soy infiel por amor...
No soy mujeriego, me llenan de fuego las mujeres estéticas. No soy mujeriego, no es cosa de juego, es cuestión de genética. No soy culpable de estar condenado a buscar un mejor ejemplar para descargar mi ansiedad, para aliviar mi enfermedad, feminomanía total, es mi herencia fatal. Me quema esta herencia maldita, me asalta de pronto, me empieza a doler y es cuando mi piel necesita la dulce anestesia de alguna mujer...
Alguna vez me han llamado así con bastante razón y otras veces por diversión, todo regresa a su cauce normal después de la lluvia, solo es un día lluvioso y una noche donde la nostalgia debería abandonarme pronto, las canciones siguen su marcha...
¿Has sido infiel, te han sido infiel?